El hotel rural tuvo una gran explosión y fué un negocio de éxito al inicio del 1992. Desde entonces el sector ha superado su nivel de madurez, con una saturación importante. Es por ello que la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio, ha situado al concepto de coliving en punto de mira de los propietarios de hoteles rurales.
Un hotel rural transformado en coliving, tiene muchas oportunidades de tener una facturación rentable y estable todo el año. Es importante destacar el tipo de cliente que busca este tipo de alojamiento: personas viajeras que desean un espacio personal, pero al mismo tiempo, tener la oportunidad de relacionarse con los otros inquilinos-huespedes. Este tipo de público es tanto nacional como internacional, y puede abarcar desde el nómada digital, hasta el viajero senior, que desea pasar largas temporadas fuera de su zona habitual, quizas en una gran ciudad. Otros colectivos interesados en los colivings rurales, son los artístas, escritores y creativos. El target es amplio, y que estrategia utilizar depende de las características del propio edificio, y por supuesto, de su ubicación. Lo que si es imprescindible es realizar un estudio previo de viabilidad, para poder determinar con exactitud el camino a seguir para transformar un hotel rural en un coliving de éxito.
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